17.5.10

Un lunes cualquiera no necesariamente es cualquier lunes


Vomítame el cariño para cuando la ira me domina. Escúpeme los besos cuando el odio me aniquila. Cóseme los abrazos al suelo para que me funda el Sol, para que me asfixie el viento, para que ahonden las lágrimas mi hundimiento. Muérdeme la piel, haciendo renacer todo lo que entre mis vísceras perdí. Arráncame el alma para sentir realmente esa soledad de la que en tantas ocasiones hemos hablado... Porque es así como te quiero, con locura, por no poder quererte con otra cosa. Es así como se entrelaza el desvío de nuestros caminos en busca del fin sin hallarlo. Es así como forjamos el amor más monstruosamente titánico e indescriptible de todo el Universo.


The Gathering, Treasure