9.11.09

Hello K

Me desespera el sonido del teléfono tan cerca de mis receptores auditivos excesivamente sensibles en un momento como este. Me desespera que me moleste en abrir una ventana para que alguien se moleste en molestarme volviendo a cerrarla. Me desespera la consternación con la que mis entrañas sobreviven para no dejarme morir. Me desespera no poder disgregarme, no poder dejar de ser y de no estar siendo en un mismo instante. Me desespera sentir y no ver cómo el tiempo pasa, cómo el mundo cambia sin alterar nada en realidad. Me desespera no dejar de contar horas, sin vivir en ellas, restando lo que tengo que esperar para olvidar tu ausencia material. Me desespera tener que comer sin poder tragar y sin querer hacerlo. Me desespera desesperarme. Me desespera la música desquiciada, el ruido estridente y presente en lo verdaderamente visual de mis imágenes. Me desespera mi paralelismo sintácticamente inevitable. Me desespera pasar tiempo inconsciente evitando el daño que sentir me cuesta seguir intentando explicar no sirve de nada.